Comparte esta noticia
En la Escuela de Psicología de la Universidad de Valparaíso, el científico señaló que una cultura centrada en lo económico tiene como consecuencia el no reconocimiento de la importancia de una relación materno infantil prolongada.
El doctor Humberto Maturana, Premio Nacional de Ciencias 1994, fue el invitado central del foro “¿Extensión o flexibilización del actual permiso postnatal”, organizado por el Movimiento por un Postnatal de Seis Meses y patrocinado por la UV, que se realizó en la Escuela de Psicología de esta casa de estudios.
El doctor Maturana estuvo acompañado de Ximena Dávila, quien junto a él es cofundadora del Instituto Matríztico, organización que busca generar espacios de conversación y reflexión en ampliación del entendimiento y comprensión de la naturaleza biológico cultural del habitar humano, a la vez que busca expandir la conciencia de cómo se hace lo que se hace en las comunidades y organizaciones.
El tema abordado fue el debatido período postnatal: ¿debe prolongarse, debe flexibilizarse? Ante la pregunta, Maturana señala: “Nosotros pensamos que lo fundamental del postnatal es la relación materno infantil y el bienestar en el crecimiento del bebé como un ser autónomo, un ser que es capaz de reflexionar eventualmente, porque crece acogido y tiene confianza en sí mismo, gracias a esa relación postnatal prolongada, que normalmente debe durar muchos años por supuesto, pero en este momento inicial es fundamental”.
A esto, Ximena Dávila añade: “La pregunta es por qué tenemos que cuestionarnos sobre algo que tiene que ver con la clase de seres que somos, seres vivos y mamíferos. ¿Qué cultura vivimos que tenemos que preguntarnos si hay que flexibilizar o alargar un postnatal? Porque los bebés no pueden quedar al mes solos; o sea, es una pregunta cultural también”. Y añade: “Las bases de la sanidad emocional del adulto, están precisamente en esa relación materno infantil desde el útero hasta ojalá mucho tiempo”.
Respecto de si el hecho de que el postnatal en Chile haya sido históricamente breve, además de cuestionado por muchos empresarios que prefieren no contratar mujeres, corresponde a un problema de género, Ximena Dávila es clara: “Yo no quisiera ponerlo en ese espacio, porque nosotros hablamos de la cultura patriarcal/matriarcal y hacemos referencia a estas culturas como modo de relacionarse, de relación de dominación, de sometimiento, en busca del éxito. Y lo patriarcal no tiene que ver sólo con el hombre: nosotras las mujeres también somos bastante patriarcales muchas veces.
Entonces esto tiene que ver con un modo de relacionarnos, más que ponerlo en el hombre o en la mujer; tiene que ver con un modo cultural de relacionarnos, y con el sometimiento”. Y tiene que ver —acota el doctor Maturana— “con una cultura centrada en lo económico, en la busca del éxito, en la competencia. Y es de ahí de donde surge el problema de no reconocer cuán fundamental es la relación materno infantil, paterno infantil.
También incide en el desarrollo de la persona: ese niño como persona, que puede llegar a ser y que uno espera que llegue a ser un ciudadano respetable, serio, capaz de colaborar, democrático; pero para eso tiene que pasar por la formación de él como persona esta relación materno infantil”.
[widgetkit id=5]