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Estudiar el clima emocional y las emociones grupales que están a la base de los conflictos territoriales constituye una cuestión altamente relevante para entender estos conflictos y generar estrategias para su posible solución (Bar-Tal, Halperin & de Rivera, 2007; Kahn, Liberman, Halperin & Ross, 2016). Dada su alta complejidad, los conflictos territoriales de largo plazo son especialmente relevantes para el estudio de las emociones. Estos conflictos están presentes en distintos lugares del mundo (Halperin, 2014), algunos de los cuales han sido estudiados sistemáticamente por la psicología social en sus dimensiones emocionales. Si bien el conflicto territorial entre Chile y Bolivia, no tiene las características intensas de los conflictos intratables (Bar-Tal, 2014), es un conflicto que tiene su origen en la Guerra del Pacífico (Castagneto, 2015) y que implicó la pérdida de territorio por parte de Bolivia (Valdivieso, 2007). Lo anterior ha llevado a que Bolivia demande a Chile en la Corte Internacional de Justicia de la Haya, cuestión que ha inquietado a la sociedad chilena (Rodríguez-Elizondo, 2016), que permanentemente se ha negado a la cesión territorial (Universidad Católica – ADIMARK, 2015), posición que algunos trabajos han mostrado que se ve influenciada por las emociones de los chilenos y chilenas (Hatibovic, 2017).

En la presente propuesta se pretende ampliar la investigación existente examinando el papel, tanto del clima socioemocional, como de las emociones grupales negativas (p.e. ira, odio y miedo) y positivas (p.ej. esperanza, empatía y respeto) en relación con el conflicto marítimo con Bolivia. Se propone examinar no solamente respuestas emocionales hacia el exogrupo (ciudadanos y políticos bolivianos), el oponente en el conflicto, sino también ante hechos conflictivos (demanda marítima boliviana ante la Corte Internacional de la Haya y la Guerra del Pacífico). Específicamente, se plantea como objetivo determinar si el apoyo a posiciones conciliadoras o beligerantes, por parte de chilenos y chilenas, es el efecto del clima socioemocional y las emociones grupales experimentadas por éstos. Del mismo modo, se observara el rol mediador de las emociones hacia: ciudadanos y políticos bolivianos, la demanda marítima y la Guerra del Pacífico entre el clima socioemocional y las posiciones que adoptan los(as) chilenos(as) ante el conflicto.

Para cumplir estos objetivos, se plantea un diseño correlacional tipo encuesta, no experimental y de corte transversal (Hernandez, Fernandez & Baptista, 2010). Se utilizará un muestreo no probabilístico por cuotas (Cantoni, 2009; Vivanco, 2006) en base a datos del Censo 2017. Los datos serán recolectados en dos momentos diferentes, en un primer momento en Valparaíso y en un segundo momento en Antofagasta. En ambas ciudades se aplicaran los mismos instrumentos de medida. Los(as) participantes serán mujeres y hombres, de nacionalidad chilena, mayores de 20 años de edad, residentes en las ciudades de Valparaíso y Antofagasta. Respecto a la muestra y el tamaño de cada cuota se hizo proporcionalmente a la distribución de estas variables en la población según los datos del Censo 2017 y se establecerán seis rangos de edad por el sexo en las ciudades de Valparaíso (n= 223) y de Antofagasta (n= 257). La recogida de información de la investigación se realizará a partir de un cuestionario construido en base a distintas escalas. Todas las respuestas son cerradas y graduadas de manera de facilitar las respuestas de los participantes y obtener datos de carácter homogéneo. Todas aquellas escalas que no estén validadas será sometidas a un proceso de adaptación y validación previo a su aplicación en la muestra mediante un estudio piloto. Para el análisis de los datos se llevarán a cabo distintos procedimientos de análisis estadísticos.

En función de lo anterior, se espera que las emociones grupales tengan un rol mediador en la relación entre el clima socioemocional con las posiciones hacia Bolivia. Se espera que a mayor percepción de clima negativo, los(as) chilenos(as) muestren más emociones positivas hacia los bolivianos, hacia la demanda marítima y hacia los políticos, más emociones negativas hacia la Guerra del Pacífico, por tanto, un mayor acuerdo con las posiciones conciliadoras hacia Bolivia. Como contrapartida, a una mayor percepción de clima socioemocional positivo, se esperan más emociones negativas hacia los bolivianos, hacia la demanda marítima y hacia los políticos, más emociones positivas hacia la Guerra del Pacífico, por ello, un mayor apoyo a las posiciones beligerantes hacia Bolivia.